El Tribunal Supremo establece que cuando el último día de trabajo de un empleado coincide con el último día del mes, el hecho causante de la pensión de jubilación se produce al día siguiente, es decir, en un mes diferente. Por lo tanto, si el último día trabajado es el 31 de enero, las bases de cotización que se deben considerar para calcular la base reguladora de la pensión comienzan en el mes de diciembre anterior, no en noviembre.

La cuestión surge en un caso de casación para la unificación de doctrina sobre la fecha del hecho causante para el cálculo de la base reguladora de la pensión de jubilación. El solicitante de la pensión argumenta que el hecho causante debe fijarse el día después del último día trabajado, incluyendo así el último mes trabajado en el cálculo. Por otro lado, el INSS sostiene que el hecho causante ocurre el mismo día en que se cesa el trabajo, excluyendo el último mes trabajado del cálculo.

El Tribunal Supremo resuelve que el hecho causante ocurre al día siguiente del cese del trabajo, ya que no se puede considerar que el cese y la prestación de servicios ocurran en la misma fecha. Además, la intención del legislador es incluir meses completos de cotización en el cálculo, por lo que no se debe excluir el último mes trabajado y cotizado al solicitar la jubilación.

Esta interpretación es consistente con decisiones previas del Tribunal Supremo en casos similares, como el complemento de aportación demográfica y la prestación de cese de actividad, donde también se consideró el hecho causante al día siguiente del último día de trabajo cuando este coincide con el final del mes.

STS (Social) de 17 octubre de 2024. EDJ 2024/715821